22 de mayo de 2014

Historia

( Foto de la red)


Volvemos al origen.
Volvemos al rumor entre los dientes,
a las garras ocultas tras la risa.

Volvemos al estómago encogido,
al dolor de cabeza, a la mirada
que se pierde oteando el horizonte.

Volvemos al silencio que incomoda
las tardes de domingo y las del lunes
como una china dura en los zapatos.

Volvemos -de repente - cuando el día
nos barruntaba sol - cálido abrazo-
mintiendo una vez más ya por costumbre.

Pero todo es distinto esta mañana:
conozco los caminos al dedillo
y sé salir del bosque por atajos.

Llevo zapatos planos y bolsillos
que dejan que se pierda lo que duele.

No hay lluvia que me moje la esperanza
ni decepción que pueda desligarme
de ser feliz en mí y en los que quiero.

El resto ya pasó a ser historia.